Fantasia, no fantasía

Se dice Fantasia, no fantasía

Se dice Fantasia, no fantasía

La traducción del nombre del reino en la novela “La historia interminable” de Michael Ende es un tema que ha generado cierto debate y requiere algo reflexión. Especialmente porque difiere de la traducción del nombre por el que se decidió la película.

Aunque se pueda discutir sobre la fidelidad ortográfica, es fundamental reconocer que el objetivo de la traducción es transmitir la esencia y el significado de la obra en el nuevo idioma. La elección de “Fantasia” considera diferentes aspectos lingüísticos, estilísticos y culturales.

En el original alemán se presenta el nombre “Phantásien”, una palabra que no existe aunque recuerda a “Fantasie”, la opción más cercana, que podría traducirse como Fantasía. Ende intentó dar al nombre del reino un toque exótico pero también trató de representar un concepto. “Phantasien” utilizada en femenino plural por Ende, hace referencia a las ensoñaciones repetitivas en estado de vigilia en la psiquiatría freudiana. Esto añade un matiz adicional a la elección del nombre en español.

El traductor debe considerar el impacto estético, la sonoridad, el contexto cultural y las connotaciones asociadas al nombre original. En este sentido, “Fantasia” sin tilde logra mantener la esencia y el encanto del reino imaginario, al tiempo que se adapta adecuadamente al español sin generar ambigüedades. Además, esta elección respeta la etimología de los nombres de países en español, al utilizar la terminación “-ia”, que indica “el país de los”.

La falta de tilde en “Fantasia” también permite una pronunciación similar entre las dos palabras en idiomas tan diferentes, como el alemán y el español. Además, al eliminar la tilde, se evita la ambigüedad con la palabra “fantasía”.

Resulta interesante observar las decisiones tomadas en otras traducciones a otros idiomas. Por ejemplo, en la versión en inglés, se utiliza “Fantastica”. Lamentablemente, en la versión cinematográfica se opta por el simple “Fantasy” que trae la confusión posterior. En francés, se optó por “Phantasia”, en italiano por “Fantàstica” y en portugués por “Fantasia”. Estas opciones muestran que los traductores enfrentaron los mismos desafíos y buscaron soluciones que preservaran el carácter misterioso y evocador del nombre original.

En resumen, la traducción de “Fantasia” sin tilde en la versión española de “La historia interminable” se posiciona como una elección coherente y acertada.

Asimismo, al examinar las decisiones tomadas en otras traducciones, se confirma la validez de esta elección, ya que se busca mantener la esencia y el misterio del reino imaginario.